Dos osos saqueando una camionera de Krispy Kream que, como parte de la ruta de reparto, se había detenido en una base militar en Alaska. Como era de costumbre, el conductor dejó las puertas abiertas sin pensar que una osa y su cachorro llegarían al vehículo y por 20 minutos los osos se dieron un festín de donas y pastelillos.