Ante la creciente violencia, la Cámara de Diputados realizó una encuesta para averiguar si la población estaría, o no, de acuerdo con facilitar el acceso a la posesión de armas de fuego para la ciudadanía. Según consta en la encuesta, aunque la mayoría de las personas considera que tener un arma de fuego es más peligroso que no tenerla y 7 de 10 mexicanos expresaron estar en contra de flexibilizar la posesión de armas de fuego. De hecho, 61% de los encuestados afirmaron que estarían de acuerdo con que se prohibiera o sancionara la portación de armas de fuego ya que consideran que ayudaría a disminuir la violencia.
La buena noticia
La población de México parece entender lo que estudios y la experiencia en otros países ha demostrado: la flexibilización del mercado de las armas de fuego solo incrementa la violencia. De hecho, según expertos, uno de los motivos principales por los que la violencia en México llegó a los niveles actuales es que los cárteles pueden traficar armamento desde Estados Unidos, que tiene un mercado de armas de fuego mucho más flexible que México. Con esta encuesta, la población rechaza una medida que solo hubiera incrementado la violencia, además de que podría ser una nueva fuente de presión para que Estados Unidos combata el tráfico de armas hacia el sur.